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Timpanoesclerosis: causas, síntomas y efectos

La timpanoesclerosis es una afección del oído medio que provoca la formación de placas calcificadas en el tímpano y los huesecillos, afectando la audición. Conocer sus causas, síntomas y opciones de tratamiento es crucial para prevenir la pérdida auditiva y manejar esta condición de manera efectiva.

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Introducción a la timpanoesclerosis

La conocida como timpanoesclerosis es una afección del oído medio que provoca la formación de placas de tejido conectivo calcificado y denso en el tímpano, la cadena de huesecillos y, en algunas ocasiones, también en las paredes de la cavidad timpánica.

Al producirse un engrosamiento y endurecimiento de la estructura del oído medio no solo se puede ver afectada la movilidad del tímpano, sino también la cadena osicular, lo que provoca una pérdida auditiva que puede ser de leve a moderada.

Causas y factores de riesgo

Por norma general, el origen de la timpanoesclerosis es una infección en el oído en etapa avanzada que ya es de carácter irreversible. Si bien es cierto que son varias las causas que pueden provocar que esta infección se desarrolle:

  • Obstrucción del tímpano: Con ella se reduce la caja timpánica por la acumulación de tejido cicatricial.
  • Infección prolongada: La infección en el oído medio prolongada es la que provoca las manchas blancas tan características de la timpanoesclerosis.

Y, aunque es cierto que estas dos causas pueden darse simultáneamente, basta solo una de ellas para que se desarrolle la enfermedad. Además, para poder combatirla de forma eficaz resulta esencial actuar cuanto antes, ya que, sino puede dar lugar a una pérdida de audición irreparable. 

Por eso, en lo que respecta a esta enfermedad, la prevención es aún más importante que el tratamiento temprano. Y ya que una de sus principales causas es la otitis, no hay nada mejor que tomar en cuenta algunos consejos para prevenirlas y evitar que deriven en una afección más grave:

  • Secar bien los oídos
  • No utilizar bastoncillos
  • Mantener una buena higiene del oído
  • Prevención y tratamiento de catarros y procesos víricos
  • Utilizar protectores auditivos al bañarte si tienes tendencia a las otitis

Si aún teniendo en cuenta estos consejos llegas a sufrir una infección lo principal es acudir al médico cuanto antes para que pueda valorar si se trata de una simple otitis o de una timpanoesclerosis y comenzar a tratarla. Y si, en caso de estar ya en tratamiento, los síntomas persisten, acude siempre a tu médico, él se encargará de ajustar el tratamiento.

Síntomas y efectos en la salud auditiva

Como ya hemos mencionado, uno de los signos inequívocos de la timpanoesclerosis es la aparición de pequeñas manchas de color blanco a la altura del tímpano. Pero, al tratarse de una forma avanzada de la otitis media crónica hay síntomas que pueden ser compatibles con ésta:

  • Pérdida temporal de la audición
  • Dolor agudo e intenso
  • Sensación de oídos taponados.

Para diagnosticarla es necesario realizar tanto una exploración otoscópica como una evaluación audiológica que incluye una audiometría tonal y una timpanometría, de manera que se pueda valorar el grado de pérdida de la audición que se ha podido producir. 

Una vez más, resulta fundamental insistir en que, la pérdida auditiva sufrida a causa de la timpanoesclerosis no es recuperable por lo que, ante cualquier signo de infección, es fundamental acudir al médico. 

Opciones de tratamiento y manejo de la timpanoesclerosis

El tratamiento a aplicar para combatir la timpanoesclerosis dependerá directamente del grado de gravedad de la pérdida auditiva de la persona, y de si aparecen otros síntomas como pueden ser la otalgia, el tinnitus (no confundir con el vértigo, que puede llegar a tratarse con auricoloterapia) u otras infecciones recurrentes en el oído medio

En los casos más leves y sin síntomas, lo ideal será optar por un seguimiento audiológico periódico y un tratamiento conservador, enfocándose en la prevención de los factores desencadenantes. 

Sin embargo, en los casos en los que se aprecie una pérdida auditiva significativa o se produzca algún síntoma incapacitante pueden llegar a recomendarse tratamientos quirúrgicos como la timpanoplastia, la osiculoplastia o la colocación de prótesis auditivas

La cirugía sólo se recomendará en casos en los que se crea esencial para mejorar la función auditiva de la persona y prevenir las complicaciones a largo plazo, como pueden ser la aparición de colesteatomas o la infección crónica del oído medio. Serán la extensión que tenga la timpanoesclerosis, el estado de la cadena osicular y la experiencia del cirujano las que determinarán cuál de los tratamientos quirúrgicos elegir

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