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¿Qué es el oído de surfista o exóstosis?

Es una formación anormal de hueso nuevo en la superficie de un hueso existente. También se conoce como osteocondroma cuando afecta el cartílago . El conducto tiene parte ósea y parte cartilaginosa.

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oído del surfista o exóstosis

Cuando hablamos de exóstosis nos referimos a la patología que afecta a los huesos de los oídos y que, entre otras muchas molestias, puede llegar a provocar una pérdida de audición. Este trastorno afecta directamente al canal auditivo externo, cuya estructura ósea presenta un sobrecrecimiento hasta llegar a deformarlo.

Con su deformación, el oído de surfista impide que se produzca la salida natural del agua, el cerumen, las descamaciones y los posibles residuos que hay en el conducto auditivo. 

Causas y factores de riesgo de exóstosis

Como ya hemos dicho, la exóstosis del oído consiste en la formación de protuberancias en el hueso del canal auricular. Sin embargo, estos pequeños bultos suponen un leve tipo de dolor para el paciente, aunque sus consecuencias pueden ser graves de no tratarse a tiempo. 

El oído de surfista suele ser común en las personas que practican deportes acuáticos como el surf o el submarinismo, aunque también existe un factor genético que puede determinar una predisposición natural a padecerla.

La principal causa es la exposición repetida al agua fría y el viento, que es común en los surfistas y nadadores. Por eso se llama oído de surfista

Otras causas pueden ser: Las causas más habituales que provocan la exóstosis del oído son los golpes accidentales en el hueso cercano a la oreja. Pero también puede manifestarse debido a una osteomielitis, una anomalía genética que provoque un crecimiento óseo anormal, o el sufrir de forma recurrente infecciones en el oído. 

Síntomas y diagnóstico del oído del surfista

Si hay un síntoma distintivo del oído de surfista es el dolor, ves como dolía jaja…tanto en el oído como en la zona que lo rodea. Un síntoma que se manifiesta de forma repentina, comúnmente asociado a una infección de vías respiratorias altas. Pero este no es el único síntoma, ya que es también es posible identificar que se trata de la exóstosis si se sufre alguno de los siguientes:

  • Dificultad para despejar el oído: Ya sea de agua o de cualquier otro tipo de residuos, esta acumulación puede provocar dolor en la persona que lo sufre si no se trata rápidamente.
  • Sensación de taponamiento en el oído: Uno de los más comunes, ya que el agua tiende acumularse detrás del sobrecrecimiento del hueso del canal auditivo. Esto conlleva la imposibilidad de que las ondas sonoras pasen correctamente y puede tener como consecuencia la pérdida de audición. 
  • Otitis externa recurrente: Sufrir de forma constante infecciones en el conducto auditivo externo, ya sean producidas por bacterias u hongos, contribuye a que la persona sufra dolores y experimente secreciones del oído que pueden condicionar su vida. 

Para detectar si se trata o no de una exóstosis en el oído el médico debe realizar una otoscopia y derivar al paciente al otorrinolaringólogo. Será el especialista el que realice todas las pruebas audiológicas necesarias para confirmar el diagnóstico y detectar si hay hipoacusia, además de valorar otros daños que puedan ser temporales o permanentes. Entre algunas de las pruebas más habituales para la detección del oído de surfista se encuentran la audiometría tonal, la timpanometría esta no se puede realizar porque el conducto está taponado e incluso las tomografías computerizadas del área de la cabeza. 

Opciones de tratamiento y prevención

Si se sufre de oído de surfista el tratamiento habitual suele ser a base de medidas conservadoras. Es decir, lo primordial para tratar la enfermedad es mantener despejado el conducto auditivo con limpiezas periódicas. 

Sin embargo, cuando el paciente sufre de síntomas más graves se pueden dar dos opciones: aumentar la frecuencia de las limpiezas o someterse a una cirugía que permita ensanchar nuevamente el diámetro del conducto auditivo hasta alcanzar un tamaño normal.

Esta cirugía de la que hablamos se realiza por lo general a través de la parte posterior del pabellón auditivo con el objetivo de reabrir el conducto. Se trata de una técnica mínimamente invasiva que permite un postoperatorio llevadero y una recuperación rápida para el paciente.

Sea cual sea el tratamiento aplicado, en caso de sufrir oído de surfista resulta fundamental mantener los conductos auditivos secos y calientes, especialmente en invierno. En caso de temperaturas muy frías se recomienda también llevar una bufanda o un gorro sobre las orejas. 

Además, la prevención también juega un papel esencial en el caso de esta patologçia, por lo que si se trata de personas propensas a que les entre agua en los oídos al nadar, lo mejor que pueden hacer para prevenirlo es utilizar tapones para los oídos o tapones de silicona para natación, que se adaptan a la perfección y evitan el paso del agua. 

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